La creadora de Poosh y el miembro de Blink-182 han causado revuelo en redes sociales desde el viernes, cuando llegaron al país europeo para casarse en Villa Olivetta. Todo culminó con una ceremonia romántica en la que los novios portaron diseños de Dolce & Gabbana Alta Moda, al igual que las invitadas (todo el matriarcado Kardashian, por supuesto).
Un día después, Kourtney y Travis fueron fotografiados disfrutando de la primavera italiana a bordo de su yate. Esta vez, prescindieron de sus atuendos elaborados para algo mucho más casual –sin romper con la estética gótica/romántica de la pareja–, sobre todo si posamos la mirada en la mayor de las hermanas Kardashian, quien continúa optando por prendas lenceras, pero esta vez en clave vaporosa.
Para pasear en su yate, Kourtney Kardashian llevó un vestido negro de estilo baby doll. Un diseño muy corto, con falda de silueta fluida y transparente con tirantes gruesos sujetando el escote de líneas rectas de la prenda. Con esta pieza, Kardashian suma un estilo más a su amplia colección de vestidos negros que hemos visto desfilar en su style file.
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